Creemos que todos los niños y niñas, tanto sanos cómo con algún daño, tienen derecho a un desarrollo sin límites. Esto significa ser acompañados en su maduración desde que nacen, a crecer sin molestias ni dolores, y alcanzar su máximo potencial de movimiento, sensorial, cognitivo, emocional y relacional.
EL NIDO es un espacio dónde acompañamos a los menores y sus familias, desde el embarazo y durante toda su crianza, en un entorno profesional, cálido y cercano. Un espacio dónde todos los miembros de la familia se sientan cómodos y escuchados en sus necesidades.
La atención se adecua a las necesidades específicas de cada niño/a y familia ofreciendo recursos globales a nivel sanitario, educativo y psicosocial. Además, trabajamos en red, es decir, que implicamos al resto de profesionales relacionados y sus familias en la planificación y evaluación de las intervenciones.
Mi nombre es Alba, nací, crecí y estudié en Madrid, pero mi familia y mi mirada siempre estuvieron puestas en La Vera.
Mi pareja y yo teníamos claro que queríamos volver al pueblo a vivir, pero a la vez, devolver a éste una parte de lo que nos dio. Nuestra aportación. Desde nuestra experiencia trabajando ambas en los servicios sanitarios fuimos conscientes de las enormes deficiencias que existen en la atención especializada a la infancia en las áreas rurales. Queríamos crear algo que aporte un servicio básico y a la vez especializado a las familias de la Vera, y en concreto que aumente el patrimonio inmaterial de nuestro pueblo.
Tras atravesar varias ideas y proyectos frustrados nace Espacio EL NIDO, para que todos los niños y niñas independientemente del lugar en el que crezcan, lo hagan con la misma calidad y garantías.
Mi nombre es Marta, he vivido siempre en Madrid, aquí es donde he crecido, me he formado y he comenzado mi vida adulta. Aunque no puedo olvidarme de mi querido pueblo Villanueva de la vera donde he pasado los veranos, festivos y fines de semana y que también me ha visto crecer, donde los abuelos nos han enseñado una vida diferente a la que llevamos en la ciudad con otros ritmos, con otros conocimientos y con la naturaleza más cerca.
Una de mis pasiones es la cocina y esto ha sido una muy buena herramienta a la hora de ejercer mi profesión. Como Nutricionista soy consciente de que hay muchos obstáculos a la hora de cambiar la alimentación y que uno de ellos es que no nos gusten una clase de alimentos o un sabor en particular. Desde mi afición en la cocina pruebo diferentes maneras de cocinar de una manera saludable pero variada los alimentos, esto es una manera más de poder ayudar a mejorar la alimentación de las personas que acuden a mi consulta. Además de no olvidar que todo el mundo es diferente y de la misma manera su alimentación también tiene que serlo ya que tiene que adecuarse a cada persona.
Graduada en Nutrición Humana y Dietética por la Universidad Autónoma de Madrid. Experta en Trastornos de la conducta alimentaria. Más de 8 años de experiencia en el control de peso en menopausia y el cambio de hábitos asociados, alimentación adaptada a patologías, intolerancias y alergias.
Me llamo Vanesa de Sousa y soy natural de Béjar, Salamanca. Un pueblo precioso a las faldas de las montañas del Sistema Central, en el que el cielo casi siempre es azul.Después de muchos años de experiencia como psicóloga, acompañando gente de varias edades en varios lugares del mundo, tomé la decisión de volver.
Creo firmemente en el poder y el valor de la diversidad, pero soy consciente de las dificultades de convivencia que muchas personas divergentes encuentran en los entornos rurales. Mi objetivo es ayudar a que todas aquellas personas que se sienten diferentes puedan encontrar su lugar y ser felices, provocando una adaptación mutua entre la persona (que adquiere nuevas herramientas para su día a día) y la comunidad (que proporcionará ajustes y adaptaciones a las personas que lo necesiten). Por esto es tan importante el trabajo con el contexto en psicoterapia.
Creo que me dedico a esto por lo que siento cada vez que tomo conciencia del privilegio que es poder acompañaros en vuestros sufrimientos y alegrías, en vuestros procesos de cambio, en vuestro crecimiento. Por la confianza que ponéis en mí para que pueda recogeros cuando os caeis.